La profesora Luz Karime Coronel, adscrita al grupo de investigación Taller de Arquitectura y Dinámicas del Territorio (TAR_GET) de la Universidad Francisco de Paula Santander, afirmó que los retos del Área Metropolitana de Cúcuta (AMC) están definidos en el Plan Integral de Desarrollo 2017- 2028 “Nuestra Área, nuestro compromiso”, a partir de 22 hechos metropolitanos que responden a las necesidades en materia física, ambiental, social, cultural, económica y de gobierno, y están alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). 

La académica señaló que el área metropolitana se ubica en una zona estratégica para el país, compartiendo dinámicas con Venezuela que han sobrecargado a la ciudad en términos de vivienda, infraestructura y demanda de servicios. “El proceso migratorio necesita atención urgente; si bien los hechos metropolitanos tienen un componente social de atención, como fenómeno particular tendría que estar en el plan metropolitano”, manifestó. 

De acuerdo con la profesora, la migración pendular que siempre ha existido con Venezuela servía para que Cúcuta tuviera movimiento económico, pero después del cierre de la frontera el 15 de agosto de 2015 y posteriormente con la pandemia ha aumentado la presencia de población vulnerable en la ciudad. “Las proyecciones que se hacen en las agendas públicas de los municipios deben incluir a esta población con el objetivo de potencializar ese crecimiento, con el acompañamiento del gobierno nacional”, dijo. “La preocupación es porque la infraestructura soporte de la ciudad está colapsada”, resaltó.

Entre otros retos, la profesora destacó la necesidad tener una conservación y mantenimiento del sistema ecológico de los ríos Pamplonita y Zulia, siendo los principales afluentes del Área Metropolitana; el fortalecimiento a la educación como elemento fundamental de desarrollo; y el impulso de estrategias de innovación y emprendimiento que permitan que la red de ciencia y tecnología desde la academia, sumado al Estado y los sectores productivos, dé respuesta a las necesidades de la sociedad civil. 

En ese contexto, la profesora mencionó algunos elementos de riesgo territorial que necesitan atención, entre ellos, el fortalecimiento de la gobernanza territorial, considerando que un área metropolitana de frontera necesita la participación de todos los actores territoriales para atender los 22 hechos metropolitanos identificados. “Esa gobernanza territorial es un acuerdo de voluntades que permitirá que el área metropolitana tenga una unidad ambiental, de transporte y planificación en torno al trabajo metropolitano, acompañada desde las diferentes agendas públicas para que las respuestas sean en conjunto y no seguir evidenciando un desgaste de acciones individuales”, afirmó. 

Otros de los riesgos tienen que ver con el medioambiente y la sostenibilidad, en relación con la gestión integral por el recurso hídrico, el cambio climático, la gestión del riesgo, la biodiversidad y los servicios ecosistémicos, la gestión de residuos sólidos y la calidad del aire, y la localización de vivienda en asentamientos informales; con la infraestructura, dada la necesidad de garantizar la conectividad con el interior del país para aumentar la competitividad de la región; y con la problemática social en un escenario de informalidad, migración y desplazamiento. 

Apuestas metropolitanas 

Álvaro Álvarez, subdirector de Planeación, Ordenamiento Territorial e Infraestructura del Área Metropolitana de Cúcuta, mencionó algunas apuestas de la región como la estructuración del Plan Estratégico Metropolitano de Ordenamiento Territorial (PEMOT), “un importante documento que va a dar lineamientos a los seis municipios para la planeación estratégica y ordenamiento territorial, en el marco de la actualización de los planes y esquemas básicos de ordenamiento territorial que se están adelantando”, explicó. 

Como autoridad de transporte, el AMC está trabajando en la estructuración del sistema estratégico de transporte público, “un proyecto que articulado con el terminal metropolitano y con una nueva concesión vial, garantizará la movilidad que requieren los habitantes”, expresó. 

Además, el AMC está ad portas de convertirse en autoridad ambiental. “Tenemos programas importantes como el área metropolitana en servicio del medio ambiente para la prevención y protección del entorno metropolitano; los proyectos ambientales serán eje estructurador del PEMOT”, resaltó Álvarez. 

El funcionario destacó que una de las apuestas de la actual dirección del AMC es la creación de un equipo interdisciplinario de profesionales para apoyar institucionalmente a los municipios en la estructuración de sus proyectos. Considerando que los problemas de los municipios pasan por falta de recursos, este equipo les ayudará a gestionar iniciativas y proyectos ante los ministerios.   

Uno de los proyectos a corto plazo que resaltó Álvarez es ‘Corazón de barrio’, una iniciativa que pretende descentralizar la Alcaldía de Cúcuta y llevar la oferta institucional a comunas y barrios de la ciudad; se proyecta la construcción de un ‘corazón de barrio’ en cada comuna, para replicar posteriormente este modelo en el sector rural y los demás municipios del área. “Es un equipamiento que va a tener espacio público, zonas verdes, salón comunal multipropósito; una oferta académica e institucional; y también servicios como oficinas de la alcaldía, puntos de pago, entre otros”, puntualizó.